Se descubre un tipo de murciélago (Barbastella barbastellus),en la Escuela de Ciencias Biológicas de la Universidad de Bristol , que ha encontrado una manera de atrapar su cena sin que esta pueda oírlo al acercarse.
Cada noche se da una batalla entre los murciélagos y sus presas. En estas luchas por alimento, los murciélagos emiten unos chillidos ultrasónicos de ecolocalización y escuchan el eco reflejado en los insectos que pueden servirles de cena. Hay animales, como las polillas, que son capaces de oír los chillidos del murciélago y evitar su ataque a través de una maniobra evasiva.Parecía que las polillas habían vencido a los murciélagos.
Pero no es así, ya que una especie particular de murciélago, el Barbastella, es capaz de contrarrestar esta maniobra evasiva; susurrando en vez de chillando.
Se estudió que este murciélago cazaba casi exclusivamente polillas que poseen oídos, por lo que la suposición de que las polillas que cazaban eran sordas quedó anulada. Los investigadores, tenían el propósito de averiguar por qué el Barbastella barbastellus puede capturar tales polillas cuando otros murciélagos fracasan en el intento, midieron cuán bien estos insectos pueden detectar a las diferentes especies de murciélagos. Realizaron las mediciones registrando la actividad del nervio auditivo en las polillas mientras rastreaban la posición de los murciélagos en vuelo. Comprobaron que el Barbastella podía acercarse a las polillas tanto como a 3,5 metros sin ser detectado a diferencia de otros murciélagos. Entonces investigaron los chillidos de ecolocalización del Barbastella y constataron que estos son hasta 100 veces mas silenciosos que los del resto de murciélagos.
Susurrando, el Barbastella barbastellus puede escuchar el eco de una polilla desprevenida antes de que el insecto se percate del murciélago acercándose. Sin embargo, esta ventaja el Barbastella barbastellus la obtiene disminuyendo el rango de distancia de detección de su radar, algo comparable a la situación a la que nos enfrentamos los humanos cuando tratamos de movernos en la oscuridad alumbrándonos sólo con una linterna en vez de con un foco.
Cada noche se da una batalla entre los murciélagos y sus presas. En estas luchas por alimento, los murciélagos emiten unos chillidos ultrasónicos de ecolocalización y escuchan el eco reflejado en los insectos que pueden servirles de cena. Hay animales, como las polillas, que son capaces de oír los chillidos del murciélago y evitar su ataque a través de una maniobra evasiva.Parecía que las polillas habían vencido a los murciélagos.
Pero no es así, ya que una especie particular de murciélago, el Barbastella, es capaz de contrarrestar esta maniobra evasiva; susurrando en vez de chillando.
Se estudió que este murciélago cazaba casi exclusivamente polillas que poseen oídos, por lo que la suposición de que las polillas que cazaban eran sordas quedó anulada. Los investigadores, tenían el propósito de averiguar por qué el Barbastella barbastellus puede capturar tales polillas cuando otros murciélagos fracasan en el intento, midieron cuán bien estos insectos pueden detectar a las diferentes especies de murciélagos. Realizaron las mediciones registrando la actividad del nervio auditivo en las polillas mientras rastreaban la posición de los murciélagos en vuelo. Comprobaron que el Barbastella podía acercarse a las polillas tanto como a 3,5 metros sin ser detectado a diferencia de otros murciélagos. Entonces investigaron los chillidos de ecolocalización del Barbastella y constataron que estos son hasta 100 veces mas silenciosos que los del resto de murciélagos.
Susurrando, el Barbastella barbastellus puede escuchar el eco de una polilla desprevenida antes de que el insecto se percate del murciélago acercándose. Sin embargo, esta ventaja el Barbastella barbastellus la obtiene disminuyendo el rango de distancia de detección de su radar, algo comparable a la situación a la que nos enfrentamos los humanos cuando tratamos de movernos en la oscuridad alumbrándonos sólo con una linterna en vez de con un foco.
Fuente: http://www.amazings.com/ciencia/zoologia.html
0 comentarios:
Publicar un comentario